Se dice que las pseudociencias son la serie de prácticas o supuestos conocimientos que presumen tener un carácter científico y que sin embargo, no tienen ningún rigor para alcanzar esta categoría y tampoco son aceptadas por la ciencia. El término proviene del griego pseudo, “falso” y ciencia, es decir, “falsa ciencia.”
Una de las principales características de estas prácticas es que invocan a seres inmateriales o sobrenaturales, de los que, por supuesto, tampoco se ha probado científicamente su existencia; por ejemplo, la criptozoología estudia supuestos animales míticos; en el caso de la ufología, trata de estudiar todo lo relacionado a seres de otro planeta que, sobra decirlo, a pesar de los miles de reportes y avistamientos, no existe una prueba fehaciente de su existencia. Otro argumento contra las pseudociencias, es que no aplican el método científico y son dogmáticas, es decir, que sus principios no admiten refutación.

Aunque casi todos los detractores de las pseudociencias creen que son formas de pasar el tiempo, hay quienes piensan que pueden resultar perjudiciales para los que las practican o para sus seguidores. A continuación, les presentamos una lista de prácticas que hoy en día se consideran pseudocientíficas:
- Alquimia que ha buscado incansablemente la llamada “piedra filosofal” con la que supuestamente se puede transmutar cualquier metal en oro, la alquimia pretende también encontrar la cura a todas las enfermedades y, la más conocida, la fuente de la eterna juventud
- Astrología es decir, la capacidad de predecir el futuro a través del movimiento de los astros
- Criptozoología que se encarga del estudio de animales que no figuran dentro de la zoología clásica y de los que se duda sobre su existencia, llamados también animales críptidos
- Parapsicología que estudia fenómenos paranormales o que no son aceptados por la psicología tradicional
- Telepatía, es decir, la capacidad de comunicarse a través de los pensamientos.
- Ufología que es el estudio de todo lo referente al fenómeno OVNI.